jueves, 15 de marzo de 2012

GUIA 4 TERMODINAMICA Y ELECTRICIDAD

CÓMO ENTENDER LAS LEYES DE LA TERMODINÁMICA Y LAS PROPIEDADES FÍSICAS DE LA MATERIA PARA COMPRENDER SU CONTRIBUCIÓN EN EL DISEÑO DE MAQUINAS QUE GENERAN PROGRESO Y AVANCE EN LA CIENCIA

La termodinámica, que es el estudio de la energía térmica de sistemas. El concepto central de la termodinámica es la temperatura. Esta palabra es tan conocida que la mayoría de nosotros, debido a nuestro sentido de caliente frío, tendemos a interpretarlo con exceso de confianza. En realidad nuestro "sentido de temperatura", no siempre es confiable. En un frío día de invierno, por ejemplo, un pasamanos parece mucho más frío al tacto que un poste de una cerca de madera. Aquí vamos a desarrollar el concepto de temperatura desde sus fundamentos, sin confiar en ninguna forma en nuestro sentido de temperatura. Este error en nuestra percepción sucede porque el hierro elimina energía de nuestros dedos sus fundamentos, sin confiar en ninguna forma en nuestrosentidodelatemperatura.
La temperatura es una de las siete cantidades básicas del SI. Los experto miden la temperatura en la escala Kelvin, que está marcada en unidades llamadas kelvins. Aun cuando la temperatura de un cuerpo aparentemente no tiene límite superior, sí tiene límite inferior; esta temperatura limitadora se toma como el cero de la escala de temperatura kelvin.

La Ley Cero De La Termodinámica
Las propiedades de numerosos cuerpos cambian cuando alternamos su temperatura, como al sacarlos de un refrigerador y ponerlos en un horno caliente. Por ejemplo cuando aumento la temperatura de esos cuerpo, aumenta el volumen de un líquido, una varilla metálica crece un poco más y aumenta la resistencia eléctrica de un alambre, al igual que aumenta la presión ejercida por un gas confinado. Podemos emplear cualquiera de esta propiedades como una base para un instrumento que nos ayudará a determinar el concepto de temperatura. Si dos cuerpos A y B están en equilibrio térmico con un tercer cuerpo T, entonces están en equilibrio térmico entre sí.

La Primera Ley De La Termodinámica
Una de las manifestaciones más fundamentales de la naturaleza es la energía que acompaña a todos los cambios y transformaciones. Así, fenómenos tan diversos como la caída de una piedra, el movimiento de una bola de billar, la combustión del carbón, o el crecimiento y reacciones de los mecanismos complejos de los seres vivientes, todos comprenden alguna absorción, emisión y redistribución de la energía. La forma más común en que ésta aparece y hacia la cual tienden las demás, es el calor. Junto a él se produce energía mecánica en el movimiento de cualquier mecanismo; energía mecánica en el movimiento de cualquier mecanismo; energía eléctrica cuando una corriente calienta un conductor o es capaz de realizar un trabajo mecánico o químico; energía radiante inherente a la luz visible y a la radiación en general; y finalmente la energía química almacenada en la sustancias, que se pone de manifiesto cuando aquéllas realizan una transformación.

Termoquímica
La termoquímica es una rama de la física química que trata de los cambios térmicos asociados a las transformaciones químicas y físicas. Su objetivo es la determinación de las cantidades de energía calorífica cedida o captada en los distintos procesos y el desarrollo de métodos de cálculo de dichos reajustes sin recurrir a la experimentación.
Desde un punto de vista práctico es esencial conocer si en una reacción específica hay absorción o desprendimiento de calor y en qué proporción a fin de ayudar su remoción o de suministrar el que sea necesario. Resulta imperioso estudiar la determinación experimental de los calores de reacción, tanto como los principios termodinámicos para evaluar los cambios sin recurrir a la experiencia. Las unidades de energía más generales son la caloría, y el julio.

Medición de los cambios térmicos
Para determinar directamente la variación de calor comprendida en una reacción , se usa el calorímetro, que consiste en un recipiente aislado lleno de agua en la cual se sumerge la cámara de reacción. Cuando la reacción es exotérmica el calor producido se transfiere al agua cuyo ascenso de temperatura se lee con precisión mediante un termómetro sumergido en ella. Conociendo la cantidad de agua, su calor específico y la variación de temperatura se calcula el calor de reacción después de tener en cuenta también algunas correcciones por radiación, velocidad de enfriamiento del calorímetro, aumento de temperatura de las vasijas, agitadores, etc. Estas correcciones se evitan al determinar la capacidad calorífica del calorímetro por combustión de cierta cantidad conocida de sustancia, cuyo calor de combustión se ha determinado con precisión. Con este fin, se eligen muestras de ácido benzoico, naftaleno o azúcar. Un procedimiento distinto de evitar correcciones es el de reproducir por calefacción eléctrica el cambio de temperatura producido en el calorímetro, para el proceso que se estudia. La cantidad de energía eléctrica para lograrlo equivale al calor desprendido en el proceso. Un aparto análogo sirve también para las reacciones endotérmicas, pero en este caso se medirán descensos de temperatura en lugar de aumentos.

Calor de Reacción a volumen o Presión Constante
Hay dos condiciones bajo las cuales se efectúan las mediciones termodinámicas, una es (a) a volumen constante y la otra (b) a presión constante. En la primera, se mantiene constante el volumen del sistema cuyo cambio térmico se busca durante todo el curso de medición. En cambio al operar a presión constante, se mantiene el sistema bien sea abierto a la atmósfera, o confinado dentro de una vasija sobre la cual se ejerce una presión constante, se mantiene el sistema bien sea abierto a la atmósfera, o confinado dentro de una vasija sobre la cual se ejerce una presión constante. En estas condiciones puede tener lugar cualquier cambio de volumen y el sistema es capaz de ajustarse a la presión externa constante. Las magnitudes de los cambios térmicos obtenidos en estas dos condiciones difieren en general. A volumen constante cualquier cambio térmico que tiene lugar se debe únicamente a la diferencia.

Capacidad Calorífica
Consideremos una cantidad de calor muy pequeña dq añadida a una sistema y supongamos que como resultado de la absorción de calor el ascenso de temperatura producido es dT. Entonces la cantidad de calor requerida para producir un ascenso de temperatura de un grado es:

PROPIEDADES FÍSICAS DE LA MATERIA

Nuestro planeta, el Sol, las estrellas, y todo lo que el hombre ve, toca o siente, es materia; incluso, los propios hombres, las plantas y los animales.
Denominamos materia a todo aquello que podemos percibir con nuestros sentidos, es decir, todo lo que podemos ver, oler, tocar, oír o saborear es materia. Toda la materia está formada por átomos y moléculas.
Un cuerpo es una porción de materia, delimitada por unas fronteras definidas, como un folio, el lápiz o la goma de borrar; varios cuerpos constituyen un sistema material. Las distintas formas de materia que constituyen los cuerpos reciben el nombre de sustancia. El agua, el vidrio, la madera, la pintura ... son distintos tipos de sustancias.
La materia presenta formas distintas, las cuales poseen características que nos permiten distinguir unos objetos de otros. El color, el olor y la textura son propiedades de la materia que nos ayudan a diferenciarlos.

LEY DE LA CONSERVACIÓN DE LA MATERIA
La ley de la conservación de la materia establece que la materia ni se pierde ni se gana en las reacciones químicas tradicionales, simplemente cambia de forma. Por consiguiente, si tenemos un cierto número de átomos de un elemento en el lado izquierdo de una ecuación, tenemos que tener el mismo número en el lado derecho. Esto implica que la masa también se conserva durante la reacción química.

PROPIEDADES FÍSICAS Y QUIMICAS
Hay dos tipos de propiedades que presenta la Materia, Propiedades Extensivas y Propiedades Intensivas. Las Propiedades Extensivas dependen de la cantidad de Materia, por ejemplo, el peso, volumen, longitud, energía potencial, calor, etc. Las Propiedades Intensivas no dependen de la Cantidad de Materia y pueden ser una relación de propiedades, por ejemplo: Temperatura, Punto de Fusión, Punto de Ebullición, Indice de Refracción, Calor Específico, Densidad, Concentración, etc.
Las Propiedades Intensivas pueden servir para identificar y caracterizar una sustancia pura.
Todos los cuerpos tienen masa ya que están compuestos por materia. También tienen peso, ya que son atraídos por la fuerza de gravedad. Por lo tanto, la masa y el peso son dos propiedades diferentes y no deben confundirse. Otra propiedad de la materia es el volumen, porque todo cuerpo ocupa un lugar en el espacio. A partir de las propiedades anteriores surgen, entre otras, propiedades como la impenetrabilidad y la dilatabilidad.
La materia está en constante cambio. Las transformaciones que pueden producirse son de dos tipos:
- Físicas: son aquellas en las que se mantienen las propiedades originales de la sustancia ya que sus moléculas no se modifican.
- Químicas: son aquellas en las que las sustancias se transforman en otras, debido a que los átomos que componen las moléculas se separan formando nuevas moléculas.
Las propiedades físicas de la materia son el conjunto de características que permiten su estudio usando los sentidos o algún instrumento específico. Los científicos se han puesto de acuerdo en determinar que la materia posee ciertas propiedades que son: masa, peso, volumen y densidad.

Masa En física, masa es la cantidad de materia que constituye un cuerpo determinado. Esta propiedad física no varía jamás, independiente del lugar donde se encuentre el cuerpo o de su volumen. Para medir la masa se utiliza un instrumento llamado balanza. Su valor debe ser expresado siempre en una de estas unidades: tonelada, kilogramo o gramo.

Peso Esta propiedad física es la fuerza de atracción que ejerce la gravedad sobre la masa de un cuerpo. A diferencia de la masa, esta propiedad varía dependiendo en el lugar donde se encuentre el cuerpo. Por ejemplo, cualquier objeto pesará más si está situado a nivel del mar que si se encuentra en lo alto de una montaña, pero su masa seguirá siendo la misma. Más sorprendente aún es la variación del peso en la Tierra v/s la Luna, ya que en el satélite el peso disminuye considerablemente.
El peso se mide con un instrumento llamado dinamómetro y su unidad se expresa en Newton (N). El dinamómetro está formado por un resorte con un extremo libre y posee una escala graduada en unidades de peso. Para saber el peso de un objeto solo se debe colgar del extremo libre del resorte, el que se estirará; mientras más se estire, más pesado es el objeto.

Volumen El volumen de un cuerpo es el espacio que éste ocupa. Para medirlo, se debe ver cuantas veces entra en él una unidad de volumen utilizada como unidad de medida. Esta unidad se llama metro cúbico, y corresponde a un cubo de un metro de lado.Para medir volúmenes mayores y menores que el metro cúbico, se utilizan sus múltiplos y submúltiplos, que aumentan o disminuyen de 1.000 en 1.000.

Densidad La densidad es una característica de cada sustancia.Nos vamos a referir a líquidos y sólidos homogéneos . Su densidad, prácticamente, no cambia con la presión y la temperatura ; mientras que los gases son muy sensibles a las variaciones de estas magnitudes.



CÓMO COMPRENDER DE MANERA ACTIVA Y PRACTICA LOS CAMPOS ELECTROSTÁTICOS Y LOS AVANCES EN LA PRODUCCIÓN DE GRAN CANTIDAD DE DISPOSITIVOS QUE HAN CONTRIBUIDO AL DESARROLLO DE LA HUMANIDAD

Como su denominación lo dice: éste es el lugar o campo en donde se manifiestan los efectos que producen unas cosas llamadas Cargas Eléctricas que a su vez, forman parte inherente de las partículas materiales subatómicas. Hasta ahora, el efecto producido por esos entes llamados cargas eléctricas, sólo ha sido detectable mutuamente por una simetría de efectos procedentes de las respectivas cargas a las que se ha dado en llamar: carga positiva a una y carga negativa a la otra.

Pues bien, ese antagonismo mutuo en la denominación y efectos al exterior de dichas cargas es lo que ha hecho posible su tangibilidad para nuestra percepción y consecuente medición ya que, su comportamiento les ha dado una cierta identidad por lo que se las conoce. Ese comportamiento consiste en que por principio de cuentas, el campo de acción de una carga, produce una fuerza de atracción mecánica, sobre otra carga de denominación contraria y una fuerza de repulsión sobre otra de su misma denominación: aunque la realidad es que, los campos eléctricos de ambas cargas interactúan de manera mutua para producir el efecto o fuerza que se manifiesta; y hasta ahora no ha habido manera de acusar la existencia del campo eléctrico que circunda a una carga si no es con la concurrencia de otra carga que nos sirve como "carga de prueba" o "carga testigo". El efecto mecánico de repulsión y atracción mancionado, es completamente tangible a nuestra capacidad perceptiva y por lo mismo, es medible de manera precisa, hasta donde la precisión de los aparatos que utilicemos lo determine pero, lo más importante es que, podemos setir esa fuerza que se ejerce de una manera categórica es decir: de la misma manera que sentimos el peso de una roca en nuestras manos, así podemos sentir la intensidad de la fuerza que se ejerce entre dos cargas eléctricas.
Se ha dado por un hecho la existencia del campo eléctrico según esto, porque en el espacio donde se localiza es fácilmente detectable por las manifestaciones de fuerzas sobre partículas materiales con cargas eléctricas definidas como de prueba, rodeadas de manera inherente, también por campos eléctricos, y ese espacio está plenamente definido y diferenciado del otro en donde no se manifiesta ese efecto por la inexistencia de éste, o más bien dicho, por la diferencia en magnitud de ese efecto ya que el campo eléctrico (magnitud del efecto que produce la carga eléctrica) que tiene como centro una carga eléctrica, disminuye con el cuadrado de la distancia pero en teoría nunca se hace cero; pero si consideramos dos campos eléctricos producidos por cargas de diferente signo o nombre, las que se encuentran en un mismo centro o de manera práctica, muy próximas con respecto al punto de observación, ambas cargas producirán sendos campos eléctricos que por ser productos de cargas contrarias, sus efectos dinámicos tangibles a nuestra capacidad perceptiva y criterio llamada intuición; desaparecerán, lo cual, no quiere decir que no existan esos dos campos eléctricos superpuestos; simplemente, sus manifestaciones se complementan y dan la apariencia de nulidad; es como cuando ponemos en ambos platos de la balanza dos masas iguales; la balanza en su índice, presenta al exterior el mismo efecto que cuando no tenía nada en cada plato, y no por eso vamos a decir que es la misma situación: (de cuando la balanza está cargada a cuando no lo está), sólo porque el índice de la balanza nos marca el mismo resultado. Si vemos sólo el índice de la balanza nos parecerá que no hay diferencia entre un caso y otro pero si además ponemos nuestra atención en la balanza con respecto a su punto de sostén, veremos que en un caso la balanza en sí pesa más que en otro. Aquí sabemos que lo que causa el peso de los cuerpos, es su masa y que, por eso una balanza cargada con pesos o masas iguales, no muestra diferencia en su índice pero que indudablemente debe pesar más, al existir pesos en sus platos aunque ambos sean iguales, cuando éstos sean mayores; o pesar menos, cuando sean menores.
En el caso de los campos eléctricos no se conoce a ciencia cierta su naturaleza y la única manera de evidenciarlos es por comparación entre ellos mismos; por lo que, cuando dos campos son iguales en magnitud y de signo contrario y además, coinciden prácticamente en un mismo lugar del espacio por estar sus respectivos focos (fuentes generadoras) demasiado cerca uno del otro, no nos es posible determinar si la vecindad de ese espacio presenta efectos perceptibles producidos por esos campos o si no existe ninguno de ellos. Cualquier carga de prueba ya sea ésta: positiva o negativa, se manifestará afectada de la misma manera en esa zona en donde se superponen dos campos generados por cargas iguales colocadas en el mismo lugar y de signo contrario, si colocamos por ejemplo: una carga de prueba, ésta será atraída por el campo de la carga de signo contrario y repelida por la de signo igual y aparentemente no habrá efecto en la carga de prueba, pero en todo caso, dos campos eléctricos de singos opuestos ubicadas en el mismo lugar o de manera práctica, nuy cerca uno del otro, aunque no den como resultado algo tangible a la experiencia actual o convencional humana, es del todo innegable su existencia por la sencilla razón de que tan luego como varíe uno de ellos, se manifiesta la tangibilidad del efecto diferencial resultante. Se sabe que, la materia está constituida esencialmente por partículas de las que, las más importantes por su abundancia, y permanencia, son: los protones con carga positiva, los electrones con carga negativa y los neutrones sin carga aparente. Pues bien, se infiere que cada porción de materia, es el foco de las respectivas cargas que generan sus protones sus electrones, y de momento no mencionaré a los neutrones. Esos campos eléctricos derivados: uno, de la parte positiva y el otro de la parte negativa, coexisten con igualdad cuantitativa y cualitativamente en oposición, y para fines prácticos, coincidentes en el espacio, por lo que, sus efectos no son tangibles ni detectables por los medios de que se dispone y en una parcial apariencia son nulos ya que se supone que, si colocamos una carga de prueba, ésta reaccionará de la misma manera sin importar su signo; se manifestará atraída por su correspondiente carga contraria y repelida por su correspondiente carga del mismo signo en magnitudes aparentemente iguales y digo aparentemente iguales, porque yo no creo que sean iguales de manera absoluta sino que predomina un ligero diferencial a favor de la fuerza de atracción (en otra parte trataré de explicar la causa de ese efecto diferencial) o sea que, aunque los campos eléctricos que producen los efectos de la componente sumatoria de la carga positiva, como los efectos que produce la componente de la carga negativa de la masa en cuestión sean exactamente iguales en magnitud y contrarios en sus sentidos, no dejan de coexistir ambos en toda su esencia intrínseca. Con todo esto, es y se hace manifiesto que de alguna manera coexisten en el espacio los efectos eléctricos de todos los campos de esta naturaleza que se originan en el Universo y que por ser tan distantes y en su conjunto casi siempre equilibrados, sólo nos es posible percibir aquellos desequilibrios que se manifiestan en nuestra vecindad próxima CLARO ESTÁ QUE ESTO ES EN CUANTO A CAMPOS ESTÁTICOS PRODUCIDOS POR CARGAS PERMANENTES SIN VARIABILIDAD EN TIEMPO NI EN ESPACIO. Por ejemplo, no podemos percibir un campo eléctrico de ningún sentido, producido por la Luna y mucho menos por la masa del sol y aún menos por la de alguna de las estrellas (SÓLO PERCIBIMOS LOS EFECTOS DIFERENCIALES DE LOS CAMPOS ELÉCTRICOS) lo cual no quiere decir que no estén presentes los campos de esos astros en nuestro espacio próximo, sólo que se encuentra el efecto de ellos, además de muy atenuado según sea su distancia, completamente equilibrado en cuanto a su naturaleza inherente es decir en tanto que, CAMPO ELÉCTRICO ya que la masa de cualquier cuerpo contiene en condiciones estables, la misma dosis de ambas cargas. Es más fácil darnos cuenta perfecta de la existencia de campos producidos en nuestra cercanía por perturbaciones que fuercen el desequilibrio posicional de la distribución de las cargas en determinados cuerpos, por ejemplo cuando frotamos materiales diferentes; porque en dichos materiales sí se establece un desequilibrio de cargas muy marcado percibido a distancias relativamente cortas, pero por ejemplo, el efecto que percibimos al frotar el peine con nuestro pelo y poder con esto atraer objetos ligeros como pedazos de papel en la proximidad de nuestra percepción; ese efecto, a distancias grandes carece de detectabilidad ya que la pequeña diferencia local, desaparece en la medida que se incrementa la distancia de observación es decir, al conjunto de: peine, pelo, y papel como tal, se le considera neutro y a grandes distancias se hacen imperceptibles las diferencias locales de la misma manera que las diferencias de campos eléctricos que se generan por el movimiento del aire en convinación con las cargas de la humedad atmosféricas y que al llegar a momentos críticos producen las descargas eléctricas generadas en la superficie terrestre o entre nubes, no producen efectos en cuanto a variabilidad de campo eléctrico detectables desde Marte o desde otra distancia similarmente grande, aunque sí el efecto de la descarga pudiera percibirse a grandes distancias. Quiero decir con lo anterior, que el espacio en lugar de estar vacío, está impregnado con la presencia de campos eléctricos en donde, los efectos individuales, sólo se neutralizan, pero que, como campos eléctricos, allí están; allí está por ejemplo el campo eléctrico de las cargas negativas existentes en la materia del sol y por supuesto el producido por las cargas positivas de la misma materia del sol y de la misma manera los campos eléctricos de todas las cargas eléctricas de toda la materia del Universo que aunque se neutralizan sus efectos como tales, allí están. Y tendremos que hablar de una multicoexistencia de campos que, es real aunque imperceptible de manera directa a la detectabilidad actual de nuestros medios o recursos. Cuando una carga eléctrica se mueve, todo el campo eléctrico que esta carga establece lógicamente también se va a mover en la misma dirección en que lo hace la carga-foco en movimiento, este movimiento no se transmite o se hace perceptible de manera inmediata en el espacio circundante, tiene un retardo que equivale a la velocidad de la luz que es "c" aproximadamente 300 000 km./seg., si el movimiento es cíclico o vibratorio esto produce una ciclicidad o vibración del campo eléctrico que se transmite al espacio vecino a esa misma velocidad "c" y en el espacio vecino en que se detecte esto, será a tal grado tangible ese efecto, que se puede cuantificar la intensidad energética de la fuente que produce esas variaciones y además, la frecuencia de la ciclicidad o vibración de esa fuente porque llegan en Forma de ondas en las que hay variación en cuanto a campo eléctrico y magnético por lo que se las llama ondas electromagnéticas. Se dice que estas ondas se transmiten en el vacío, (lo que en realidad se debe decir es que, en el espacio en que se transmiten, puede no haber materia o lo que entendemos como tal.) y de allí el supuesto absurdo (según la ciencia normal) de que sean ondas y no corpúsculos los entes que llegan al ojo o al aparato que detecte esos efectos, porque según ellos, por el vacío no pueden transcurrir ondas; o sea que, para ellos, las ondas sólo se pueden establecer con la "complicidad" de algo material y como en los espacios intergalácticos o interestelares no hay practicamente materia, la luz sólo se transmite en su concepción "corpuscular"; pero yo creo que aquella multicoexistencia de campos producidos por la materia universal, establece el medio por el cual estos efectos son transmitidos y aunque parece que esa coexistencia de campos en equilibrio, sea en apariencia pasiva, son parte activa y determinante de la transmisión del efecto electromagnético; y en el caso particular: de la luz. No sé a ciencia cierta la magnitud de esos que bien pudieran llamarse "campos etéreos", pero creo que, se puede hablar de una "densidad" efectiva de esa coexistencia de campos debida a la o las concentraciones próximas de materia. Cada porción material que pueble el Universo, debe estar rodeada de sus correspondientes campos, debidos a la componente tanto positiva como negativa de las partículas que la integran, dichos campos deben tener un valor máximo en la contigüedad de la porción material en cuestión y tendrá una disminución a medida que se pruebe con distancias cada vez mayores; así en la superficie del sol por ejemplo, tendremos la suma de sus campos en su valor máximo y a la distancia de nuestro planeta ya estará substancialmente disminuido en la misma proporción en que aumente el cuadrado de la distancia al sol por lo que se infiere que, tiene que ser diferente, o más bien dicho, mayor en la vecindad de nuestro sistema solar por ejemplo que en los espacios interestelares, y que en los espacios intergalácticos debe ser aún menor, y que si esto es así, la velocidad del efecto lumínico, tendría que sufrir cambios substanciales que, bien pudieran explicar el corrimiento al rojo de los objetos visibles más distantes (en apariencia por el efecto Doppler Fizeau) lo que hace suponer que los objetos del Universo en su conjunto se expanden; y de la inexplicable grandeza de las fuentes llamadas cuasares que por esa razón bien pudieran estar considerablemente mucho más cerca de lo que aparentan y no con la lejanía que se deriva de la suposición de que el espacio universal aparentemente vacío, es homogéneo, isotransparente e igual que en nuestras más cercanas proximidades. De la misma manera que se pensó en la antigüedad, que todo el espacio era aire y al fin, se demostró por medios indirectos que el aire es materia y que no se prolongaba su existencia más allá de cierto límite y que a mayor altura era menor su concentración o densidad. Pues bien, de esa manera pudiéramos estar en un error y no vamos a esperar a tener que explorar lo inexplorable, habiendo elementos que por su inexplicabilidad pudieran servirnos de bases indirectas para demostrar lo que es menos inexplicable o definitivamente explicable.
Lo anterior nos llevaría a entender al éter, como una consecuencia de la superposición de campos eléctricos inherentes a las concentraciones materiales que pueblan el Universo, como algo variable en el espacio y sería más propio hablar de "campo etéreo" ya que, la densidad y el efecto de éste, derivaría de la concentración de la materia en una cierta localidad del Universo. Habría que analizar lo que pasaría con la transmisión del efecto lumínico al variar la "densidad" del medio por el cual se ejerce el proceso ondulatorio. Si la onda que consideremos pasa de un campo etéreo más denso a otro menos denso, esto deberá hacer que dicha onda se alargue para contener la misma proporción de "éter" y en lo sucesivo retomaré el término ("éter"), con la salvedad de que es sólo a manera de ensayo y con la connotación que de antemano he tratado de dar a entender.
Pues bien, esa onda al expandirse, (aumenta su longitud) y en este caso, para conservar la frecuencia que posee, tendrá por fuerza que desplazarse a mayor velocidad. ¿en qué proporción se han de manifestar estas variaciones? No se puede de momento saber ya que para estas determinaciones se requiere de mucha experiencia con recursos indirectos puesto que es obvio que nadie puede estar en un punto intergaláctico para tomar muestras de acontecimientos y establecer comparaciones, pero de momento, ya se puede especular con el hecho de que la variación existe y que, ésta se ejercerá en determinada magnitud.

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